En las últimas 24 horas el país ha registrado cuatro mil 397 casos nuevos de COVID-19, por lo que hasta este jueves ya suman 105 mil 680 personas infectadas y 12 mil 545 defunciones, informó el director general de Epidemiología, José Luis Alomía.
Del total de los casos confirmados, detalló en rueda de prensa, 18 mil 377 se mantienen activos. También se registraron 46 mil 659 casos sospechosos y 161 mil 724 negativos. Desde el inicio de la epidemia se han estudiado a 314 mil 63 personas.
La Ciudad de México, Tabasco, Aguascalientes, Sinaloa y Quintana Roo, son las demarcaciones que cuentan con la mayor incidencia de casos activos.
Por su parte, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, reiteró que las 816 defunciones registradas este jueves no ocurrieron en las últimas 24 horas.
“Hoy vimos periódicos de circulación nacional que pusieron en sus primeras planas ‘el día de mayor número de muertes’, sin embargo, sería mucho más contributivo si estas primeras planas ayudaran a la nación a ubicar en qué situación está (la epidemia) en vez de causar un sobresalto”, comentó.
Explicó que el número o punto máximo de muertes que se han registrado en 24 horas ha sido de 340 defunciones, las cuales ocurrieron el pasado 17 de mayo, “día de máxima mortalidad hasta el momento”.
“(Por ejemplo), hoy que es 4 de junio tenemos tres (muertes), y luego tenemos las de días previos (qué suman las 816 hasta ahora). (…) Tenemos algunas como la del 27 de abril o estas dos del 29 de abril, 1 de mayo, etcétera que fueron confirmadas hoy”, comentó.
En ese sentido, el funcionario señaló que, en distintas proyecciones, se calculó que el país podría registrar un mínimo de seis mil muertes, ocho mil, 12 mil 500 o incluso, en el escenario más catastrófico, 28 mil. Escenarios que, dijo, no se descartan aún.
López-Gatell aseguró que por el momento no se tiene contemplado volver a un confinamiento, ya que si bien, todo el país se encuentra en rojo en el semáforo de riesgo, confía en las estrategias que pongan en marcha los estados para disminuir el riesgo de un rebrote.